El inminente fin de semestre

Quizás porque nunca he estado completamente fuera de la universidad, en el pasado los principios y fines de semestre se mezclaban con los otros días del año, sin ser más ni menos memorables que los anteriores. Pero desde que inició esta cruzada en UF, los días están cada uno bien delimitados por su cercanía o lejanía a fechas de entrega que hay que cumplir, tareas que hay que hacer y los papeles que hay que firmar/entregar/ revisar. Así que estoy más que consciente de que faltan menos de dos semanas para que se acabe mi segundo semestre.

Aún no es tiempo de reflexiones de fin de semestre (que vendrán, no se preocupen). En cambio, es tiempo de trasnoches, de madrugadas en la oficina (los estudiantes de PHD tenemos oficinas asignadas), de codificar paginas de Internet – que es menos complicado y mas aburrido de lo que suena— y de prepararme para exámenes.

Así que si me pierdo no se preocupen. Si no blogueo es que estoy haciendo otros usos de la computadora. Si no cojo el teléfono es porque me tocó otra amanecida en la universidad. Si respondo emailes tarde o apresuradamente, es que estoy muy cansada para escribir cosas graciosas, profundas o coherentes.

Como dirían los fanáticos con complejos de Nostradamus “el fin esta cerca” y dentro de tres semanas estaré de vacaciones, en mi casa materna, disfrutando del calor de nuestra tierra y del amor de mi familia y amigos. Si es que sobrevivo esta prueba…